El Arte Mudéjar

El estilo mudéjar es el estilo artístico más representativo de Cuéllar, siendo considerado uno de los focos más importantes y numeroso de Castilla y León.

Esta amplia representación del Mudéjar en Cuéllar es consecuencia de la floreciente economía que disfrutó la villa entre los siglos XII y XV, gracias en gran parte a la predilección que mostraron por Cuéllar los reyes Fernando II y en especial Alfonso X «El Sabio». Así, en este periodo está contabilizada la existencia de 24 iglesias  para una población que en aquella época contaba con unos 1.700 habitantes. La población musulmana, responsable de este estilo artístico fue aquí numerosa, tan y como atestiguan tanto la documentación conservada como la maqbara o cementerio musulmán de la villa, la más importante localizadas en Castilla y León hasta el momento.

Cuéllar cuenta con muestras de este estilo tanto en construcciones religiosas como en otras defensivas y populares.

 

Centro de Interpretación del Arte Mudéjar

La iglesia de San Martín acoge entre sus muros el Centro de Interpretación del Arte Mudéjar, donde a través de un espectáculo audiovisual se pretende introducir al visitante en la simbología de este estilo artístico. Utiliza emoción y razón  para viajar en el tiempo hasta los siglos XII y XIII donde el mudéjar es a la vez un arte, un sistema arquitectónico y una forma de vida que se desarrolla con la convivencia pacífica de las culturas cristiana, musulmana y judía.

 

Ruta por el Mudéjar Cuellarano

Comenzaremos el recorrido en la iglesia de San Martín, que alberga el Centro de Interpretación del Arte Mudéjar, donde destacan sus puertas y especialmente su triple ábside. Continuaremos por el Castillo de los Duques de Alburquerque, que conserva una de sus puertas de este estilo, enmarcada por torreones, con escaleras, pasadizos, ventanas y rastrillo mudéjares.

Desde allí divisamos el arco de San Basilio, conjunto defensivo de compleja construcción con arcos enmarcados por alfices, torreones de avanzadilla, verdugadas de ladrillo…

Nos dirigimos a la iglesia de San Andrés, el templo mudéjar más completo de Cuéllar. Arcos, casetones, frisos y nacelas de ladrillo recorren sus ábsides y muros. En el interior encontraremos interesantes esculturas y frescos mudéjares.

Atravesaremos el arco de San Andrés, con restos mudéjares en su arco, para pasar por la Judería y llegar a la iglesia de San Esteban, que nos muestra su ábside, considerado de los más bellos, compuesto magistralmente por arcos, casetones y frisos de esquinilla. En su interior se encuentran cuatro sepulcros de alabastro ricamente decorados con yeserías mudéjares policromadas.

Desde allí nos dirigiremos al ábside de Santiago, con arquerías y casetones mudéjares, restos de la antigua iglesia. Junto a él, el arco y torreón de Santiago, parte de la muralla, desde donde disfrutaremos de una magnífica vista del Mar de Pinares.

Bajamos hasta la plaza Mayor para observar la mezcla de estilos de la iglesia de San Miguel, entre los que conserva arquerías de ladrillo. Muy cerca encontraremos el palacio de Santa Cruz, edificio civil del siglo XVII asentado sobre la muralla construido bajo este estilo artístico.

Volviendo a la plaza bajaremos hasta la torre de Santa Marina, que conserva toda la traza mudéjar, con arquerías cegadas y enmarcadas en casetones o mampostería con verdugadas de ladrillo.

Continuamos por la iglesia del convento de La Trinidad, con la cabecera y ábsides mudéjares.

Para finalizar paseamos hasta la iglesia de El Salvador, singular templo de esbelta torre con ábside mudéjar y contrafuertes en forma de arbotantes que lo sujetan.

En la comarca encontramos espadañas, artesonados, torres, ábsides, presbiterior o pinturas e poblaciones como Campo de Cuéllar, Chañe, Chatún, Dehesa de Cuéllar, Fresneda de Cuéllar, Fuente el Olmo, Gomezserracín, Narros, Navas de oro, Pinarejos, Samboal, San Cristóbal de Cuéllar o Villaverde de Íscar.